Odio estar enfermo. Que uno esté malo un día o dos por culpa de la migraña o un catarrazo pase pero estar varios días hecho una piltrafa humana siempre lo he considerado una pérdida de tiempo. Y me fastidia enormemente. Porque si pudiese estar en casa haciendo algo o leyendo o viendo películas y series aún pero estar con la gripe es asqueroso; la fiebre, el dolor de cabeza y la tos tuberculosa me quitan las ganas de todo (bueno, ayer ya pude mirarme algunas cosas y mi cabeza lo agradeció). Luego, me acuerdo de mi hermana la más pequeña y las operaciones que pasó cuando tenía pocos años y de las personas que lo pasan realmente mal con enfermedades jodidisimas y te sientes un ser despreciable, como diría el pato Lucas, por quejarme de una miserable gripe y llevar cuatro días sin salir de casa salvo para ir al médico. Si es que en el fondo nos quejamos por todo...
2 comentarios:
¡¡¡¡¡¡¡¡¡Cuídate!!!!!!!!
Gaacias nene, igualmente ;)
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