Dickens

Uno de mis vicios favoritos es la lectura y, aunque tengo unos gustos definidos, la verdad es que procuro leer de casi todo. Hace bastantes años, en la época del instituto o de la universidad, leía una mayor variedad, y cantidad, y de ese período recuerdo leer mucha novela inglesa, desde Agatha Christie (para relajarme en los meses de exámenes) hasta Orwell o Conan Doyle. También aproveché para leer algunos libros de Dickens, los clásicos sobre todo, Oliver Twist, David Copperfield y Cuento de Navidad, aunque el que siempre más me ha gustado es Historia de dos ciudades. Curiosamente, por culpa de Perdidos, me han entrado ganas de leer Nuestro común amigo, a ver si un día de estos lo cojo prestado en la biblioteca.

Precisamente, tras acabar la quinta temporada de Perdidos, me puse a ver Little Dorrit, una miniserie inglesa de 14 episodios basada en la novela homónima de Dickens y que tenía en el disco duro desde hace un par de meses. Narra las aventuras de Amy Dorrit, cuyo padre lleva encarcelado en Marshalsea veinticinco años por deudas, y que empieza a trabajar de costurera en la casa de Mrs Cleenam, cuyo hijo Arthur regresa de un largo viaje por negocios en China, y que cree que la desgracia de los Dorrit puede estar vinculada a su propia familia. Como en muchos de los libros de Dickens, hay amores no correspondidos pero sobre todo misterios, secretos de familia, pasados turbulentos, personajes infames y demás.


La miniserie fue producida por la BBC lo que de por sí ya significa calidad. Una recreación de la época impresionante, unos actores y actrices estupendos a pesar de que únicamente conozco a Andy Serkis (el que hacía de Gollum en El señor de los anillos y salía en la versión de King Kong de Peter Jackson) pero creo que algunos son bastante conocidos en Inglaterra. Y una fotografía y una música bastante buenos. No hablo del guión y de la adaptación porque no me he leído el libro y no se hasta que punto han sido fieles a él, pero conociendo a los ingleses y la BBC me da que la adaptación es bastante buena.


Siempre se ha dicho que Dickens refleja bastante bien la sociedad victoriana. Bueno, en realidad, muchos de los libros están ambientados antes de la era victoriana, en las primeras décadas del siglo XIX. Aún así, la serie refleja muy bien la sociedad de la época, con todo lo relacionado a la apariencia, el orgullo de clase, la riqueza, etc; pero también todo lo relacionado con el mundo del capitalismo primitivo, la burocracia implacable, los bancos, la quiebra de las empresas. Además, Dickens aprovechaba experiencias suyas para plasmarlas en sus libros; por ejemplo, su padre estuvo encarcelado en Marshalsea por deudas.

La serie es altamente recomendable, si te gusta todo lo relacionado con esta época y las historias con giros inesperados, secretos e intrigas (muy propio de la novela por entregas, además). Salvo el primer y último episodio, que duran una hora, el resto de los episodios dura una media hora, lo que hace bastante llevadero el verla. Aquí un trailer previo de la serie, que no he podido encontrar nada de la música de ella.

Larga y próspera vida.

Mundo blogueril

Aunque a más de uno le cueste creerlo, el que escribe por aquí es una persona bastante cortada, tímida e introvertida. Sí, vale, ya se que esa afirmación dicha así y el hecho de tener un blog donde uno va contando sus intimidades no parece una idea muy coherente, pero ¿quien ha dicho que soy coherente? La verdad es que me cuesta entrarle a la gente, entablar conversaciones. Lo de ser extrovertido, hablar con todo el mundo, animar el cotarro, ser el alma de la fiesta vamos, nunca ha ido conmigo; más bien todo lo contrario, yo era el que estaba a un lado en la fiesta observando y participando lo justito. Y esa es una de las peores cosas que llevo con el tema de la boda, por no decir la peor: ser el centro de atención de todo bicho viviente esa noche.

Claro que si hay confianza, estoy con los colegas o entre gente con las que me siento bien, entonces me desinhibo y soy más participativo. A veces, hay feeling con otras personas y al poco ya estás compartiendo de todo y pasándolo estupendamente, que fue lo que me pasó con Will cuando nos vimos el año pasado. Eso sí, no creo que sea nunca el que anima la fiesta, el que está todo el rato llamando la atención y esas cosas.

Algo así me pasa en el mundo blogueril. Ya saben que ahí a la derecha hay una estupenda lista de blogs que suelo visitar con bastante frecuencia, en los que comento y participo y de los que conozco algún que otro bloguero. Sin embargo, hay otros que suelo leer asiduamente pero no comento, más que nada porque me siento como entrar en una casa sin haber sido invitado y me da bastante no-se-qué. Sí, vale, neurosis y psicopatías mías, ya lo se, jajaja. A veces, me lanzo a la piscina y comento algo pero con mucho reparo. En fin, a lo que iba, aquí les dejo algunos blogs que están bastante bien y que también leo aunque no estén a la derecha, algunos seguro que los conocen ya pero siempre es bueno compartir.

Proudstarinthecity: el blog de proudstar, un chico bastante majo, le encanta la música, los cómics (es uno de los miembros del Freak like us) y al que el amor le es un poco esquivo. Divertido, animado y con sus momentos de caída libre, como todos nosotros.

Maggie Wang Kenobi: sólo por el nombre, esta semidiosa merece estar en el Olimpo, que lo estará. El blog de Maggie nos cuenta sus vivencias de megarrrrrica, semidiosa y sus líos con sus mucamos trabajadores. Eso sí, la pobre es una sufridora nata por tener tantos millones y tener que rebajarse al mundo mortal.

Pasa el Mocho: el blog de Mocho que, como él mismo dice, son las divagaciones de un maricón pasado de vueltas, de años y de kilos (o sea, loca, mayora y foca). Diversión garantizada, música pop de ayer y hoy, algo de porno (tan matizado que decir porno es decir mucho) y sus aventuras con su tx, su pareja.

Nils Bla Världen: el blog de Nils, un redactor de una revista, y dónde encontrarás chicos estupendos, comentarios sobre ropa, cine y vivencias personales. En realidad, ya le hecho algún comentario en el blog pero poca cosa, la verdad.

Y alguno más, pero por hoy creo que es suficiente.

Black Eyed Peas - I Gotta Feeling
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Totalmente perdido

Hace como dos semanas nuestro codificador de la TDT decidió pasar un kilo de nosotros y hacer huelga, así que dejó en negro aquellos canales que veíamos más y nos conservó la morralla: los canales locales (una auténtica basura), los canales autonómicos (más basura) y los de televisión española, de los cuales sólo me interesaban el canal de noticias 24 horas y el teledeporte (algo por lo del Mundial de atletismo). Puede que hasta nos haya hecho un favor.

Así que no es de extrañar que en este plazo nos hayamos enganchado a Perdidos. Y digo nos, porque he atraído a mi chico a la serie otra vez, jejeje, que ese también es de los que se pegan seis episodios seguidos sin pestañear. Lo puse al corriente de lo que había ocurrido hasta finales de la segunda temporada y se vio conmigo las tres últimas. Y menudo enganche. Nos hemos zampado las dos últimas temporadas en menos de una semana, claro que también son más cortas que las anteriores (las cuatro temporadas en tres semanas). Pero es que ves uno, termina con el clásico golpe de efecto y dices: "Venga, va, uno más" y sin darte cuenta te ves cinco o seis episodios de corrido. Y cuando llegas al final de la quinta temporada y te dejan con el cliffhanger hasta la próxima, te dan ganas de machacar a los guionistas y la ABC para que emitan los episodios YA. Que sufrimiento hasta enero, joder.

Eso sí, cada vez estoy más convencido de que sin la música de Michael Giacchino la serie no sería la misma. Me encantan los temas y cómo la música está ahí, en la sombra, sin destacar pero ambientando las escenas. Y, por supuesto, añadiendo más misterio, más emoción, más intriga.

Y que conste que no es lo único que he hecho estos días atrás. Que también me ha dado tiempo de seguir al día con mis otras series (Nurse Jackie y The closer), ver alguna que otra peli, leer y hacer algo de vida social. Todo con el permiso de mi gran amiga la migraña.

Detallitos

Estos días atrás he estado un poco ganso. Bueno, un poco no, un mucho, quizás demasiado. No tenía ganas de na' excepto estar botado en casa haciendo el gandul. Hasta ayer lunes que mi vieja amiga enemiga la migraña atacó desde el domingo por la noche y me forzó a quedarme en casa. Pero vamos, que ya estoy mucho mejor aunque ahí sigue, en la sombra.

La semana pasada vino por mi trabajo una amiga y me dejó un detallito de un viaje reciente que hizo por Alemania. Con ella y el resto del grupo de amigos siempre nos hacemos algún regalo cuando nos vamos de viaje, una chorrada, un detalle, una bobería para acordarte de ellos. No se quien empezó la costumbre pero creo que fue allá por los noventa porque cuando me fui a vivir con mi pareja, hace ya casi ocho años, tenía ya un grupo bastante amplio de este tipo de recuerdos de todas partes que no hacían más que atraer polvo. Y ahí siguen en la bolsa de la mudanza.

Después de eso me puse un poco respondón y reclamé que no me trajeran cosas inútiles, si querían traer algo que fuese de comer o me pudiese poner. Así que hubo una época que me harté a dulces turcos y pastelería regional de la Península, al tiempo que me traían algunas cosas más útiles como un par de camisetas. Eso sí, no he podido librarme de algunos detalles que les recuerda mi vena friki, siempre que pueden. Esta amiga estuvo en Berlín, en la tienda Lego y cuando vio lo de abajo se acordó de mí y me lo trajo. Si es que no puede ser...


Lo peor es que por Reyes de este año mi pareja me había regalado otro llavero.


Si es que no se pueden poner las cosas tan fáciles, hombreya.

Armas de mujer

Ayer me invitaron en el Caralibro a hacerme fan de una página. Y como soy de natural un curioso la miré primero y me descojoné un rato porque era sobre un corto: Jodienda Warrick. ¿Quieres saber de qué va? Pues ahí tienes los trailers, porque existen dos, el segundo con subtítulos en inglés.

Por supuesto, me hice fan de la página y me reí un rato con las parodias de las cantantes, la ambientación un poco cutre y algunas escenas como la de las dos vestidas de V y debatiendo si es Withney o no la que aperece. He intentado ver por ahí alguna manera de conseguir el corto por los canales habituales, ya nos entendemos ¿no?, pero aún no lo he conseguido. No se porqué pero cuando lo ví me hizo recordar las armas femeninas de seducción. Y me vinieron a la cabeza algunas de las escenas de Ice Age 3 y Scrat, sobre todo la que abre la película. Porque ¿quien no tiene un corazoncito, a pesar de las obsesiones?

Casualidades

Los que lleven un tiempo siguiendo mis desventuras con el tema bodorrio sabrán que tanto la boda como la celebración tendrán lugar aquí. Hace un par de semanas, la chica que lleva el tema de la celebración nos comentó que seria recomendable sacar un permiso del ayuntamiento para poner música y estar hasta ciertas horas de la noche sin tener problemas con la policía, porque el lugar es zona residencial y está rodeado de casas y con el hotel Santa Catalina al lado.

Después de varias peripecias burocráticas en el ayuntamiento, logré llegar a la concejalía de distrito, que encima está casi al lado de mi trabajo, y que es la que lleva el tema. Después de informarme a conciencia, rellené la pertinente solicitud y me fui al registro y mientras esperaba oí a una chica que le comentaba a la persona del registro lo del permiso para celebraciones y tal. Yo me adelanté y le comenté lo que tenía que hacer y ella me dijo: "Tú eres el chico que has estado delante de nosotros todo el rato según íbamos por las oficinas del ayuntamiento". Vamos, que había hecho el mismo recorrido que yo pero como diez minutos más tarde. Y empezó una situación de autoreconocimiento en plan "y tú celebras la boda en tal sitio", "sí", "la tuya es la boda de octubre", "y la tuya es la de septiembre", vamos que nos conocíamos de oídas por culpa de la que organiza la celebración. Y nos pusimos a contarnos nuestras desventuras de bodas y demás.

Ese mismo día, al ratillo, me llamó mi pareja y me comenta que había fallecido un vecino, y que lo enterraban esa misma tarde. En fin, que después de comer, allá que nos fuimos al duelo un rato y estando allí, hala, la primera casualidad: había una cara conocida. No, no era la que se casaba en octubre sino la persona que en el ayuntamiento gestionaba los permisos de las celebraciones y que me había informado de todo. Cuando pasó por mi lado, la saludé y se lo recordé, y menos mal porque a los dos días me llamaron para decirme que ya lo tenía y que pasara a buscarlo.

Ayer por la tarde, mientras hacía tiempo para ir a recoger a mi chico me pasé por El timo británico El Corte Inglés. Aproveché para agenciarme un libro del neurótico y esquizofrénico de Philip K. Dick y me fuí a la sección de guías de viaje para curiosear un poco. Al rato se me acerca una chica y se me queda mirando. Levanto la vista, si hubiese sido un maromazo hace tiempo que lo habría hecho, y era la misma de la boda de octubre que estaba con su novio mirando guías para su viaje. Pues allí que estuvimos poniéndonos al corriente sobre cómo llevábamos el asunto. Y en una de estas me dice: "mira, nosotros vamos a ir a espiar a tu boda, a ver como organiza la celebración, la decoración y demás". "En plan paparazzi" y le comenté que me daba igual, que si podía ver algo entre tanta gente que estará allí pues que aproveche.

Y ahí que lo dejamos y nos fuimos cada uno por su lado. Aunque estoy convencido de que me la volveré a encontrar antes de la boda, porque este mundo es un pañuelo y esta isla una cagadita de paloma.

Perrea perrea

Este fin de semana no he hecho nada. Exclusivamente perrear en el sillón, enganchadisisisimo a Perdidos, y con las oportunas visitas a la cocina en busca de provisiones y al baño para aligerar el peso. Y ratitos para cariños y mimos, que también son necesarios. Vamos, que tengo el sillón como el de Homer, casi amoldado a la figura de mi cuerpo.

La única salida que se puede llamar como tal fue el sábado por la noche a casa de una amiga, que había vuelto de pasar un mes de vacaciones familiares en el norte de la Hispania, y nos invitó a un picoteo para ponernos al día y pasar un buen rato. Mi pareja le contó que estaba asombrado por mi actitud, la de estar por las tardes botado en el sillón enchufado a una serie, acostumbrado a verme siempre trasteando con cursos, escribiendo o haciendo cualquier cosa por ahí. Pero la verdad es que estaba un poco como muerto y necesitaba descansar de todo. Así que salidas, las muy justitas, y el resto a descansar, que esta semana se prevé nuevamente movidita. A ver si dejo ya cerradas un par de cosas de la boda y vamos acabando.

Lo de Perdidos no tiene nombre. Yo pensaba terminar la segunda temporada este fin de semana. Ja. Y ja. Al ritmo que he ido prácticamente me he ventilado la tercera también, sólo me quedan los dos últimos episodios que los he dejado para esta noche. Que enganche, señor. Y eso que me he puesto con otras series, que el fin de semana me vi un par de episodios de The closer y sigo con Nurse Jackie. Y aproveché para verme la tercera parte de Ice Age, flojita aunque me sigo partiendo de risa con Scrat, la ardilla, que esta vez encuentra la horma de su zapato. Es la mejor junto con Buck, un nuevo personaje. La música de John Powell está genial, vibrante, animada y con mucho sentido del humor.

You make loving fun

Cada día tomamos decisiones, pequeñas o grandes, que afectan al curso de nuestra vida. Cuando abrí el blog lo hice sin ningún tipo de pretensiones salvo de la de contar lo que se me pasara por la cabeza y mis vicisitudes, sin esperar que a alguien le pudiera interesar, más que nada para ahorrarme, como dice nuestro vigoréxico favorito, los psiquiatras, psicoanalistas y demás listas.

Así comenzó esta etapa que no sabía cuánto iba a durar. Ni la cantidad de gente estupenda que iba a conocer. Y a lo tonto, a lo tonto este blog hoy cumple dos años. Gracias por estar ahí, y lo que es más importante: por seguir.

Sweet wonderful you,
You make me happy with the things you do,
Oh, oh, oh can it be so,
This feeling follows me wherever I go.

I never did believe in miracles,
But I've a feeling it's time to try.
I never did believe in the ways of magic,
But I'm beginning to wonder why.

I never did believe in miracles,
But I've a feeling it's time to try.
I never did believe in the ways of magic,
But I'm beginning to wonder why.

Don't, don't break the spell,
It would be different and you know it will.
You, you make loving fun,
And I don't have to tell you but you're the only one.

You, you make loving fun.
(It's all I want to do)
You, you make loving fun.
(It's all i want to do)
You, you make loving fun.
(It's all I want to do)
You, you make loving fun.
(It's all i want to do)

Vaya semanita

Definitivamente, ayer hice choof. Llevaba una semana de un no parar, por las mañanas a currar y por las tardes un corre-corre, que si a mirar una cosilla de la decoración de las mesas de la boda, que si a probar la tarta, que si ir a buscar el traje, que si mirar otra cosa para la boda, etc etc. Y llegaba a mi casa a las 8 o 9 de la tarde reventadito del todo (menos mal que tenía a Jack para salvarme un par de horas). Y todo porque quiero dejarlo todo atado YA, es decir, la semana que viene, para luego poder descansar un poco y no tener que decidir a última hora. Que se le va a hacer, me gusta que las cosas se hagan con tiempo y no al final corriendo.

Ayer tuve una reunión de un grupo de trabajo con mis compañeros de fatigas, que se llevó media mañana. Y cuando volvía a mi trabajo con el tiempo justo para recoger las cosas y fichar, el cuerpo ya dijo "hasta aquí, nene". Así que ayer por la tarde me la pasé tirado en el sofá, viendo el final de la segunda temporada de Perdidos y los primeros episodios de la tercera, mientras le pasaba a Mokko algunas series en un disco duro que me había dejado. Así que, al menos, en esto voy cumpliendo lo que tenía previsto.


La consecuencia de todo es que voy medio arrastrándome por todos los lados y sin ganas de hacer nada. Apenas tengo tiempo para postear en condiciones y me he quedado dormido por la mañana dos veces esta semana. Hoy me he levantado por los pelos. El despertador llevaba avisando media hora mientras yo me preguntaba entre sueños y con una canción de Abba de por medio (no preguntéis porqué, es lo único que recuerdo del sueño) por qué sonaba si hoy era sábado, hasta que en una de estas caí que no, que era viernes. Pero es que el miércoles ya pasó algo parecido, sólo fue media hora y gracias a que tengo el cuerpo acostumbrado a levantarme a esa hora. Y el cansancio se va notando.

Ya sé que últimamente estoy un pelín monotemático pero es lo que toca, al menos hasta el 11 de septiembre. Que ganas de que llegue el 12 de septiembre y descansar a gusto, oigan, pero aún queda un poco.

Hoy el cumpleaños de Will, y para celebrarlo, nada mejor que algo que sé le va a gustar. Si es que lo ve, claro, jajaja.

Sugababes - About You Now
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Petula

No tenía pensado postear hoy, pero hablando con Mokko se me ocurrió esta canción. Así que ahí va, dedicado a Mokko.

-31

31 días y contando. Así que vamos a dar un pequeño anticipo de lo que sonará, aunque no en esta versión. Como me encanta Ewan McGregor.

Perdido

Este fin de semana he estado un poco perdido. Bueno, no tanto, que he estado con Jack, Sawyer, Kate, Hugo, John, Michael, Charlie, Mr Echo y los demás náufragos del vuelo 815 de Oceanic.


Hace unos tres años dejé de ver Perdidos. Había visto la primera temporada y los primeros episodios de la segunda y la tregua coincidió con la última mudanza de casa. Luego estuve liado con algunas cosillas, oposiciones y demás y, aunque tenía los episodios de la segunda y la tercera temporada, no me había puesto con ellos. Desde antes del verano estoy intentando verlos y este fin de semana que estaba tranquilo en casa me lancé a la piscina. Me he pegado pequeñas dosis de dos episodios y descansos y me he podido ver algo más de la mitad de la segunda temporada. Con un poco de suerte espero acabar la temporada antes del fin de la semana y empezar la tercera sobre la marcha. Mi objetivo es ver las temporadas que se han emitido antes de que empiece la sexta sin llegar a saturarme. Por eso dejaré la cuarta y quinta temporada para después de la boda.

La música de Michael Giacchino es fantástica, como siempre.

También tuve tiempo de terracear un poco con los colegas, tanto el sábado por la noche como ayer domingo por la tarde. Y recibir visitas familiares, como la de mi hermana con mis sobrinillas, que se pegaron el lote tocando la batería con el Rock Band. No todo va a ser enchufarse a la televisión.

Arriba, arriba

Y no voy a ponerme a hablar de Speedy González, ese ratón hipervitamínico que emulaba al Correcaminos. Sino de Up, la última película de Pixar, que fui a ver ayer por la tarde. Imprescindible, increíble, emocionante y divertida. ¿Qué más se puede pedir?

La película narra la historia de Carl Fredricksen, un antiguo vendedor de globos, que presionado por circunstancias que no voy a desvelar decide cumplir los deseos de su esposa y se embarca en una aventura, inesperadamente acompañado de Russell, un boy scout en busca de su última insignia para ascender en el escalafón. Dicho así parece algo sencillo y nada espectacular pero cuando empiezas a ver la película te das cuenta que para nada será así y que pronto tomará otros derroteros.

La primera media hora es sencillamente espectacular. A lo largo de varias escenas que se desarrollan casi sin palabras asistimos al origen de la ilusión por la aventura de Carl y Ellie, su esposa, desde que se conocen. Y su posterior vida juntos, esta vez únicamente acompañado por la música.

La segunda parte de la película toma otros derroteros. Los protagonistas, Carl y Russell, llegan a su destino y comienzan las aventuras sin fin. No voy a contar nada más porque seguro que más de uno no la ha visto y no pienso estropearles el posible visionado de la película.

Lo que sí me ha quedado claro es que Pixar se enfrenta a una doble tesitura en el futuro: por un lado, se nota cada vez más que las películas ya no estan exclusivamente dirigidas al público infantil, de hecho buena parte de las escenas de esta y de Wall-E, están claramente orientadas a los adultos que son los que pueden entender ciertas situaciones; por otro lado, se resisten a perder esa clientela y siguen ofreciendo historias y personajes que puedan captar la atención de su público infantil. Y, de hecho, eso se aprecia claramente en Up, donde la primera parte es claramente adulta, contando la vida en pareja y con escenas casi sin diálogo únicamente sostenidas por la música, mientras que una vez que llegan a su destino la película toma otro ritmo, más dinámico, divertido y claramente destinado a los chiquillos. Y esto no es negativo, que me encantan las situaciones divertidas y me río igual que los chiquillos (en el fondo disfruto un montón).

Vamos, que se merece verla no una sino un par de veces. Y la música de Michael Giacchino genial, como siempre. Un tema que suena a lo largo de toda la película en diversas formas y que rápidamente asocias a Carl, acompañado de música vibrante y que te toca la fibra sensible.

PD: Y no quiero dejar pasar la oportunidad para mencionar mi película favorita de Pixar: Monstruos SA, con un impagable Michael Wachowski, alias Ojito Saltón. Estupenda.

Gnomos

Y hubiera querido añadir algo más: si los humanos eran tan estúpidos, ¿cómo era que habían construido aquella Tienda y todos aquellos camiones? Si los gnomos fueran tan sabios, se dijo, serían los humanos quienes les robarían cosas a ellos. Tal vez fueran grandes y lentos, pero aquellos humanos parecían muy listos, realmente.

"No me sorprendería -pensó por último- que fueran tan inteligentes como las ratas, por lo menos."

El éxodo de los gnomos. Terry Pratchett

Cuando elijo un libro lo hago porque espero que me guste, por diversos motivos y dependiendo de la temática, claro. Uno de ellos es que me divierta, que me haga reir. Por eso me gustaban los libros de Tom Sharpe, con Wilt y compañía, que aunque no eran ninguna maravilla pues te divertían con ese humor tan británico, mucha ironía, sarcasmo a raudales y golpes bajos.

Hace muchos años, tranquilamente pueden hacer como catorce o quince años, me compré los dos primeros volúmenes de una trilogía de Terry Pratchett llamada El éxodo de los gnomos. Por entonces, Pratchett empezaba a ser conocido por sus libros del Mundodisco del que me había leído los dos primeros y me habían encantado. Así que me compré estos, pero por diversas circunstancias, y luego porque estuvieron agotados y descatalogados, no pude conseguir el tercer volumen. Hace cosa de un mes, visitando El Timo Británico descubrí que Timo Más Timún Mas había publicado las tres novelas en un sólo volumen en un formato algo más grande que una edición de bolsillo. Y lo cogí, por supuesto. Y me he vuelto a enganchar a las aventuras de Masklin, Grimma, el abad Gurder, Dorcas el inventor y las ocurrencias de la abuela Morkie, capaz de curarte con palabras... ehem.



¿Y de qué va el libro? Pues de un grupo de gnomos que viven en el Exterior y llegan a la Tienda donde se encuentran con muchos más gnomos, dónde descubren quiénes son, de dónde vienen y dónde comienza un estupendo viaje de vuelta al hogar. Si te gusta la ironía, los juegos de palabras, tener la sonrisa en la boca y soltar de vez en cuando alguna carcajada, entonces este es tu libro. Pratchett nunca defrauda. Comencé a leerlo justo el fin de semana pasado, que me lo llevé al sur y ya me he leído los dos primeros libros. Y el resto caerá antes de que termine la semana, seguro.

Retornos indeseados

No. De verdad que no. Hay cosas que no deben imaginarse (o tal vez sí, que cada uno es libre de imaginar lo que quiera), pero si se piensan en ellas no deben plamarse en el papel. Y aún menos llevarlas al cine.

He leído, con estupor y cara desencajada, que la Twentieth Century Fox sigue manteniendo viva la franquicia de Alien y va a rodar una precuela de toda la saga. Y Ridley Scott será el director. A ver Ridley, sientate aquí un momentito. ¿Qué te hemos hecho nosotros para que nos castigues así? ¿Qué? ¿De verdad te hace falta el dinero? Pues pide un crédito, coño, pero deja el alien tranquilo. A veces pienso que deberías haberte quedado en la Nostromo mientras Sigourney escapaba.

Pero es que no es lo único. Vía Las horas perdidas me entero que George Miller está preparando la ¡cuarta parte! de Mad Max. Lo que yo digo, entre el calor del verano y la falta de ideas en el cine, vamos a acabar rodando la precuela de Lo que el viento se llevó. Mmmmm, que gran idea, no sé si ponerme a escribir y vendérsela dentro de un par de años, total dudo que los directivos recuerden esa película.

Y para acabar he leído, no sé dónde, cuando lo descubra lo digo, que Spielberg y Lucas andan medio preparando una quinta parte de Indiana Jones. Sí, para ponerse a llorar o directamente darse a la bebida, o las dos cosas.

Relax

Ahora que estamos en pleno verano llegó el tiempo de fiestas y romerias. El sábado lo fue en el pueblo donde vivo y supongo que vino mucha gente, que estuvieron con música hasta las tantas y que sudaron la gota gorda. Digo que supongo porque visto lo que pasó el año pasado decidí que este año no me iba a quedar en casa sudando con el calor y aguantando a la gente. Que uno siempre ha sido un urbanita y esto de las romerías de pueblo como que no me llaman mucho.

Así que desde mediados de semana estaba rumiando qué hacer y mi chico me dijo que porqué no nos íbamos a los sures. Miré un par de páginas por los interneces y conseguí una ofertilla bastante buena. Se apuntó un amigo y los tres nos fuimos para abajo. Y se desató el infierno. Cuando llegamos hacía una calor y un aire caliente que casi quemaba, no me extraña que todo el mundo estuviese metido en la piscina. Ayer domingo me enteré que estuvimos a cuarenta y pico grados y en la playa llegaron por momentos a los cincuenta, lo cual para nosotros es como estar en el infierno pero sin música de Woody Allen, y que el chiringuito de la playa cerró a las dos de la tarde porque no podían más.

Después de cenar nos fuimos a refrescarnos por las terracitas: que si unas cervezas, que si unos mojitos, más cervezas (ellos) hasta que mi chico se retiró como la Cenicienta, que al día siguiente tenía que trabajar, pobrecillo. Yo seguí de marcha con este amigo y nos metimos en los locales a bailar un poco. Y entonces empezó lo que llamé la noche Will. Porque parecía que estaba por allí dirigiendo a los que ponían la música. Que si las Pussycat Dolls

que si la Britney Spears, que si las Girls Aloud, otra vez las Pussycat Dolls... Vamos, que sólo faltaba la Delta Goodrem para hacerme la noche completita, y si hubiese salido ya habría pensado que estaba el espíritu de Will por allí. Eso sí, me lo pasé genial, bailando, bebiendo alguna copilla y vacilando con este amigo.

Ayer domingo nos fuimos a la playa. El día estaba genial, mucho sol, el aire más fresquita y el agua estupenda. Nos quedamos hasta tarde, nos fuimos a comer algo (prácticamente la cena) y llegué a mi casa con el tiempo justo para ducharme, soltar las cosas que había llevado y preparar la ropa para hoy. Vamos, que me ha servido para recargar las pilas, relajarme bastante y venir colorado como un tomate.

Así que para acabar, nada mejor que un poco de música de Up. Espero poder verla esta semana.