Esta era la entrada que tenía pensada para ayer pero la ciencia obliga, o más bien la falta de. A lo que ibamos. Con septiembre se acaban las vacaciones (para muchos), la vuelta al cole o al trabajo, se va el verano y el lucir palmito (para algunos) y es una época no apta para depresiv@s, que la vuelta a la rutina ya es dura de por sí. Pero, claro, hay cosillas que te animan la vida. Por ejemplo, las nuevas temporadas de las series, o el estreno de las que empiezan. Así que hoy toca repaso de lo que ha empezado de nuevo o las que continúan.
Ha empezado la sexta temporada de
Medium. Tentaciones tengo de contar cómo acabó la quinta pero, no, me morderé la lengua por si alguien no la ha visto. Sé que muchos dirán que la serie no es nada del otro jueves pero a mí me engancha. Ver las vicisitudes de la familia Dubois me gusta, con la pobre Allison pasando de todo mientras resuelve casos de asesinatos. Aunque he de reconocer que Jack Webber, el marido, está estupendo. ¿Tendré motivaciones ocultas? Pues eso, que ha vuelto Allison haciendo de las suyas y lo que mejor sabe: pillar al asesino.
Hablando de asesinos, también ha vuelto el asesino más carismático,
Dexter, en su cuarta temporada, pero he de decir que aún no me he puesto con ningún capítulo. Me conozco y esperaré a tener unos cuantos para verlos en minimaratones de tres o cuatro seguidos, que uno es así de enganchado y cuando me da, me da.
Una vuelta esperada y que sí he empezado a ver al ritmo de emisión en Estados Unidos es
Bones. Al principio no me llamaba la atención pero poco a poco la fui viendo en la Sexta y le cogí el gustillo. Me visioné este verano la cuarta temporada, de la que solo habían emitido en España la primera mitad (ahora están con la segunda mitad), y me enganchó así que me he puesto con la quinta. Y es que la Dra. Brennan es mucha doctora pero sobre todo me encantan los ayudantes que han ido desfilando por la cuarta temporada y continúan en ésta, desde el friki hasta el totalmente centrado en su trabajo, eso sí todos unos cocos, como el resto del personal del Jeffersonian.
Y el retorno más esperado, por el momento, es para
Fringe. Para recordar algunos detalles me revisioné el último capítulo de la primera temporada. Vuelvo a opinar que es estupendo. Y el comienzo de la segunda temporada no ha fallado en las expectativas, he visto los dos primeros y me han encantado. Se dice mucho por ahí que la ABC ha estado promocionando
FlashForward como la heredera de
Lost; para nada, amigos, para nada. Para mí, la verdadera heredera de
Lost es
Fringe: buenos guiones, misterios más misterios, unos estupendos personajes con más oscuros que claros, la música de Giacchino y siempre deseando ver más.
Entre las novedades, pues empecemos por la más evidente:
FlashForward. He vis
to los dos primeros episodios y he de decir que me gusta bastante. Hay notables variaciones argumentales respecto a la novela de Sawyer en la que se basa. La principal es la causa que motiva el desmayo colectivo y el salto en el futuro; en el libro se producía por culpa del acelerador que se había construido en la frontera franco-suiza. Aquí aún no se ha descubierto dicha causa pero, por lo que se da a entender en estos dos episodios, no van a ir por ahí los tiros. Hay que reconocer que la serie es espectacular, se nota cada dólar invertido en la producción. Además, el guión está bastante bien y te deja en suspense mientras se van desvelando pequeños detalles poco a poco. Pero, vamos, que tampoco me genera esa ansiedad por tener el episodio ya para verlo al día siguiente. Los iré bajando y viendo en lotes de dos o tres episodios a la vez, que me conozco y no me gusta que me dejen a medias. Y esta serie, al igual que
Fringe, tiene pinta de dejarte con la miel en los labios con el oportuno cliffhanger hasta el próximo episodio.
Otra novedad que he visto y me ha gustado bastante es
Modern Family. Tres familias: la tradicional, un matrimonio con tres hijos donde la madre intenta ser dura con sus hijos mientras el padre quiere ser el guay, el matrimonio con diferencia de edad, en el que ella es colombiana con un hijo, y el matrimonio gay, que acaba de adoptar a una niña vietnamita. Todos diferentes entre sí pero con más semejanzas de lo que puede parecer a primera vista, contando cosas cotidianas pero desde un punto de vista parecido a un falso documental, ya que los protagonistas a veces se dirigen a la cámara. Es una comedia y te diviertes un rato. Lo mejor es que no va en plan moralizante, lo cual ya es de agradecer. Recomendable.
Y, mientras, tengo en capilla las dos primeras temporadas de
Mad Men, la primera temporada de
Sons of anarchy y la segunda temporada de
Damages (que no he visto aunque la tengo desde hace meses). Por no hablar de
V, que llega el mes que viene, y
Lost y
Caprica, que empezarán en enero. Yo ya me he puesto las pilas ¿y tú?