Nueve años después de cerrar la trilogía de El señor de los anillos, Peter Jackson vuelve al mundo de la Tierra Media para presentar El Hobbit.
Bilbo oyéndolas venir
El Hobbit: un viaje inesperado, que es el título que le han colocado para diferenciarla de las próximas, es la primera película de una nueva trilogía ambientada en la Tierra Media. En ella, Bilbo Bolsón un tranquilo hobbit se ve envuelto en una aventura junto con trece enanos y un mago que buscan recuperar el reino de los enanos cuyo heredero legítimo, Thorin Escudo de Roble, es el líder del grupo. Y no cuento más porque esta primera parte narra el comienzo de la historia y las primeras aventuras, como el encuentro con los trolls, la llegada a Rivendel y la huida de los orcos del interior de la montaña.
A ver, vayamos por partes que hay mucho que contar. Como siempre, y sobre todo después de la experiencia de El señor de los anillos, todo lo que atañe a la dirección artística, vestuario, maquillaje, ambientación, fotografía, etc es algo impresionante. Se nota la experiencia recogida, y aumentada, con las películas anteriores y en esto creo que nadie puede poner ninguna pega. El detallismo, el cuidado con todo lo que aparece en la pantalla, es absoluto y se transmite. Lo mismo sucede con los efectos especiales, que han mejorado notablemente en todos estos años y se notan menos (en algunos casos bastante y en otros no tanto), así como en el personaje de Gollum que está mejor definido (físicamente hablando).
En cuanto a la elección de los actores, creo que han acertado bastante. Me gustaría verla en versión original y comprobar las voces de los enanos pero la actuación de todos ellos cumple bastante bien. Y lo mismo me parece de Martin Freeman en su papel de Bilbo, que es perfecto en sus cambios de actiutud y dota al personaje de sus momentos de humor y otros de tensión, sobre todo en la escena con Gollum. Sí que se nota el paso de los años en Ian McKellen y Cate Blanchett pero, vamos, que es algo que se puede obviar y no supone ninguna carga para la película.
Entonces, si la película está bastante bien ¿qué es lo que falla en ella? Si es que falla algo, claro. Creo que el problema que tiene la película es el sentido o la orientación que le han querido dar. A ver, El señor de los anillos es una trilogía donde prima el sentido de la épica, los héroes que luchan en inferioridad de condiciones contra el mal y que lo darán todo para que prevalezca el bien. Y esta situación se trasvasó muy bien de las novelas a las películas. En cambio, El hobbit es un libro de aventuras, y aunque se titule así el hobbit del que habla, Bilbo Bolsón, no es el protagonista absoluto del mismo sino que comparte protagonismo con Thorin y alguno más que queda por salir. Es verdad, que en El hobbit suceden hechos que tendrán consecuencias trascendentales con Bilbo como eje central pero no es el dueño absoluto de la acción.
La cuestión que me ha chirríado viendo la película ha sido esa. El libro es una novela relativamente corta (en comparación con la siguientes), de aventuras, donde la épica, el sacrificio y la lucha sucede al final. Y en la película han intentado convertir a Bilbo casi en un héroe forzoso desde el comienzo, cuando en realidad él se mete en todo el embrollo por amor a la aventura y para conocer elfos. Por eso, las escenas que más me han gustado han sido, quizás, las más tranquilas, las que la mayoría de la gente está criticando precisamente por eso, por su lentitud, como la llegada y presentación de los enanos, la escena de los trolls o el enfrentamiento entre Bilbo y Gollum, mientras que, aunque las disfrute, me disgusta un poco toda la parte de la huida del interior de la montaña y la escena final.
Es verdad que hay añadidos sobre el relato original pero, con la excepción de la escena de lucha final, no me parecen que supongan un lastre. Por ejemplo, me gustó el comienzo que nos pone en antecentes de los motivos de los enanos para ir en busca de la Montaña Solitaria o la escena del Concilio Blanco, por citar un par de ellas. Es verdad que alargan la trama pero también la enriquecen un poco porque te da más información, que en los libros aparece de forma muy tangencial o directamente en los apéndices.
No obstante, y para terminar un poco, tampoco es que la película sea decepcionante o mala. En absoluto. Tal vez sea que el nivel dejado con la trilogía de El señor de los anillos era elevado en conjunto, que como siempre las primeras partes son de presentación y tardan en arrancar, etc, pero la nota sigue siendo más que aceptable. De uno a diez le pondría un siete justito
Y ahora la música. Jackson ha vuelto, como era lógico y de esperar, con Howard Shore para componer la banda sonora de estas películas. El trabajo es magnífico. Shore vuelve a crear una música que continúa, y conecta en diversas ocasiones, con la de El señor de los anillos. De hecho, en varios momentos vuelven a sonar temas de aquella, como el de la comarca, los elfos, etc, sin dejar de aportar nuevos cortes para el disfrute. Como en las anteriores, hay partes de narración donde la música subraya lo que el Bilbo mayor está escribiendo junto con otras de fuerza bruta como en toda la parte final de la película. Desde luego, es un trabajo impresionante y tengo ganas de escuchar lo que estará componiendo para las próximas partes.