Bueno, hoy quiero hablar un poco de un género eminentemente americano, es decir hollywoodiense, aunque se haya realizado en otros países también, con mayor o menor éxito: el musical. Cuando el sonido llegó el cine se produjo una especie de explosión musical en un afán por atraer al público a las salas. Muchos cantantes famosos pasaron por la pantalla, otros se hicieron famosos precisamente gracias al cine. Al comienzo, las canciones y el baile se insertaban en escenas que daban pie a ello, como la escenificación de musicales en el teatro, escenas en clubes de moda, etc. Pero con el tiempo la música adquirió entidad propia y las canciones, con baile o no, se insertaban para explicar parte de la trama o desarrollarla. Este género además tenía mucha tradición en EEUU merced a los vodeviles y el teatro musical por lo que su paso al cine era inevitable.
En otros países cuesta entender eso de que viendo una pelicula la gente, de repente, se ponga a cantar y bailar. Sin embargo, es una expresión y una manera de seguir con la historia. Es decir, no hay límite entre la fantasía que pueda vivir el personaje y la realidad de la trama, de ahí que no se produzca un salto entre la escena y la canción. Otra cuestión la constituyen las obras que con totalmente cantadas, sin diálogos.
En la década de 1930 los musicales comenzaron a desarrollarse, fundamentalmente con el éxito de la pareja Fred Astaire-Ginger Rogers. Pero el período dorado del musical, al menos para mí, va desde mediados de la década de 1940 hasta la de 1960, unos veinte años más o menos. En este período muchas estrellas brillaron en el firmamento del musical: Fred Astaire, Gene Kelly, Judy Garland, Cyd Charisse, Julie Andrews, Frank Sinatra, Howard Keel, Bing Crosby, etc, etc, etc. Otros muchos actores y actrices cantaron y bailaron en películas puntuales. El músical adquirió carta de género e independencia gracia a dos directores: Stanley Donen y Vincent Minelli, que llevaron al género a su máxima expresión en este período.
Y todo ello para introducir la que es, para mí, el mejor musical de la historia: Cantando bajo la lluvia. La película narra, en comedia, el paso del cine mudo al sonoro y como los actores y actrices tuvieron que adaptarse a la nueva situación, lo que supuso el fin de la carrera para muchos. Un guión genial, unos actores/actrices bien elegidos, unos números musicales estupendos, que más decir. No voy a extenderme mucho porque, como siempre, una imagen vale más que mil palabras. Así que voy a poner tres videos.
El primero es el comienzo de la película. Siento que sea en versión original sin subtitulos porque es muy irónico. En un estreno de su película (que por cierto reúne todos los tópicos), el personaje de Gene Kelly señala que su lema siempre ha sido la dignidad y a partir de ahi lo que cuenta es lo opuesto a lo que se ve (la realidad).
El segundo corte es cuando acuden a clases de dicción y sucede lo que tiene que suceder.
Por último, el tercero es el de "Good Morning", el previo al famoso que da titulo a la película (y que no pongo porque creo que todo el mundo lo conoce, ¿no?).
En otros países cuesta entender eso de que viendo una pelicula la gente, de repente, se ponga a cantar y bailar. Sin embargo, es una expresión y una manera de seguir con la historia. Es decir, no hay límite entre la fantasía que pueda vivir el personaje y la realidad de la trama, de ahí que no se produzca un salto entre la escena y la canción. Otra cuestión la constituyen las obras que con totalmente cantadas, sin diálogos.
En la década de 1930 los musicales comenzaron a desarrollarse, fundamentalmente con el éxito de la pareja Fred Astaire-Ginger Rogers. Pero el período dorado del musical, al menos para mí, va desde mediados de la década de 1940 hasta la de 1960, unos veinte años más o menos. En este período muchas estrellas brillaron en el firmamento del musical: Fred Astaire, Gene Kelly, Judy Garland, Cyd Charisse, Julie Andrews, Frank Sinatra, Howard Keel, Bing Crosby, etc, etc, etc. Otros muchos actores y actrices cantaron y bailaron en películas puntuales. El músical adquirió carta de género e independencia gracia a dos directores: Stanley Donen y Vincent Minelli, que llevaron al género a su máxima expresión en este período.
Y todo ello para introducir la que es, para mí, el mejor musical de la historia: Cantando bajo la lluvia. La película narra, en comedia, el paso del cine mudo al sonoro y como los actores y actrices tuvieron que adaptarse a la nueva situación, lo que supuso el fin de la carrera para muchos. Un guión genial, unos actores/actrices bien elegidos, unos números musicales estupendos, que más decir. No voy a extenderme mucho porque, como siempre, una imagen vale más que mil palabras. Así que voy a poner tres videos.
El primero es el comienzo de la película. Siento que sea en versión original sin subtitulos porque es muy irónico. En un estreno de su película (que por cierto reúne todos los tópicos), el personaje de Gene Kelly señala que su lema siempre ha sido la dignidad y a partir de ahi lo que cuenta es lo opuesto a lo que se ve (la realidad).
El segundo corte es cuando acuden a clases de dicción y sucede lo que tiene que suceder.
Por último, el tercero es el de "Good Morning", el previo al famoso que da titulo a la película (y que no pongo porque creo que todo el mundo lo conoce, ¿no?).
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