Bueno, vayamos por partes. La cabeza mejor, no al 100% pero sí mucho mejor. En realidad, todo es fruto de una lucha entre el inconsciente y mi yo consciente, vamos que soy un gili...s. Porque yo estoy relativamente tranquilo, con los lógicos nervios de empezar en un nuevo sitio, pero es que mi inconsciente tiene que estar con un ataque de histeria que ríete de los que tienen acciones en la Bolsa, o de Rajoy ayer antes de empezar el desfile. En fin, que siempre me pasa lo mismo cuando cambio de curro o de servicio. La última vez que me pasó, que me pusieron en un servicio solito, estuve dos semanas con cefaleas tensionales. Así que me consuelo pensando que ya queda menos...
El fin de semana ayudó a tranquilizarme un poco. No hacer nada, quedar con los amigos para una partida, comer comida no apta para sufridores del corazón, dormir y vegetar. Además el trabajo va bastante tranquilito. Ya voy accediendo a las aplicaciones informáticas, me voy haciendo con la distribución de los depósitos e, incluso, ya tengo planificado un viajecito a la isla de enfrente a hacer un curso de un día (una puesta a punto). Vamos, hacia adelante y a buen ritmo.
Y mañana será el gran día, otro más. Por la tarde me toca participar en el coloquio de marras, digo de historia. Menos mal que solo serán quince minutos e intentaré que sean menos. No me gusta nada hablar en público, más bien no me gusta nada ser el centro de atención, que uno esté hablando y varios pares de ojos fijos en tí. Brrrr. Espero que haya cuatro gatos y no den mucho el coñazo.
Y para autoanimarme, un poco de música.
Larga y próspera vida
El fin de semana ayudó a tranquilizarme un poco. No hacer nada, quedar con los amigos para una partida, comer comida no apta para sufridores del corazón, dormir y vegetar. Además el trabajo va bastante tranquilito. Ya voy accediendo a las aplicaciones informáticas, me voy haciendo con la distribución de los depósitos e, incluso, ya tengo planificado un viajecito a la isla de enfrente a hacer un curso de un día (una puesta a punto). Vamos, hacia adelante y a buen ritmo.
Y mañana será el gran día, otro más. Por la tarde me toca participar en el coloquio de marras, digo de historia. Menos mal que solo serán quince minutos e intentaré que sean menos. No me gusta nada hablar en público, más bien no me gusta nada ser el centro de atención, que uno esté hablando y varios pares de ojos fijos en tí. Brrrr. Espero que haya cuatro gatos y no den mucho el coñazo.
Y para autoanimarme, un poco de música.
Larga y próspera vida
9 comentarios:
no me gusta nada ser el centro de atención
Así nunca podrás llegar a vedette y te quedarás toda la vida de corista, nene...
:) todo irá bien!
No me seas gallina que a poco que te esfuerces pones huevos y todo.. si hablar en publico no es nada, amosssss tranqui saldrá bien. Ademas habla mirando hacia el suelo y eso ayuda.. a l menos a mi.. miraba casi siempre las diapositivas las 1as veces, después ya miras de frente y hasta te sientas a la mesa, ya veras chaval....
Ay, Star, yo estoy fatal con la migraña también... Y respecto al coloquio, no te preocupes, si allí son todo historiadores y nadie hace caso a nadie: la mayoría se pasa las sesiones durmiendo o calculando cuán carcomidas están las vigas del techo y qué posibilidades hay de que se les vengan encima... Besitos y suerte.
Sota, las vedettes se lo tienen muy creído, me conformo con ser corista...
Will, lo se ;)
Mac, lo que suelo hacer es mirar a un punto indefinido que no se centre en nadie, suele funcionar.
Nica, o leyendo el periódico, o calculando el tiempo para el café, o sesteando, si da tiempo para todo.
Bueno, paciencia. Si ya sabes que es algo pasajero, mucho mejor.
Ánimo cielo, todo saldrá estupendamente. Me alegro que estés mejor de la migraña y que el trabajo vaya viento en popa. Besitos
¿Qué? ¿Qué tal ese coloquio? ¿Te hicieron la ola al acabar?
Como siempre, mejor de lo que uno supone. La ola no pero agradecidos por la brevedad, jejejeje.
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